Christian Riveros Henríquez (de 38 años) ha sido sometido a unas 50 intervenciones quirúrgicas en la Clínica Indisa de Santiago, para intentar reconstruir el 90% de cuerpo que resultó quemado tras un accidente múltiple ocurrido en octubre del año pasado, en las cercanías de Victoria, en la región de La Araucanía.
Su historia no sólo es una lección de vida, también es la muestra palpable que este padre de familia es un sobreviviente, un luchador que hasta el momento le gana por puntos una estrecha pelea a la muerte, gracias al apoyo de su familia, amigos, y desconocidos que se han emocionado con su coraje para enfrentar una situación límite.
EL ACCIDENTE
El 9 octubre Christian salió desde su casa en Lautaro para trasladarse hasta Angol, donde debía someterse a un control médico, pero nunca llegó a su destino. Un accidente múltiple que cobró la vida de dos personas en el kilómetro 607 de la Ruta 5 Sur, lo dejó con el 90% de su cuerpo quemado.
En la querella presentada contra quienes resulten responsables como autores o encubridores del delito de lesiones graves, se precisa que a las 07:30 horas de ese día, al pasar el cruce La Turbina, se produjo un accidente de tránsito en donde se vio involucrado un camión con dos semirremolque, un auto Station Wagon y tres camionetas, vehículos que fueron chocando por alcance, presumiblemente por la alta densidad de la niebla habitual en el lugar, sin embargo, no generando lesionados y sólo daños menores a los vehículos involucrados, quedando estos detenidos en la calzada que va de sur a norte por la Ruta 5 Sur.
Por esta misma ruta –sostiene la acción legal– se dirigía un camión conducido por Rodolfo Alexis Matuz Carrasco, “quien se desplazaba a una velocidad no apropiada atendida las condiciones climáticas del lugar, quien no alcanzó a advertir a tiempo la colisión de vehículos que se encontraban más adelante en la ruta, a la altura del Puente Traiguén, frenando el tractocamión que conducía, pero sin lograrlo a tiempo, chocando los vehículos ya indicados precedentemente. Dado lo brusco de su acción no dio tiempo a los vehículos que venían detrás de él para reducir la velocidad, colisionando así en cadena con
más de diez vehículos”.
En el escrito se precisa “que es ampliamente conocido en el sector que se trata de una zona de abundantes bancos de niebla, es decir, la suspensión de partículas de agua que reducen la visibilidad a menos de 1 kilómetro. Sin embargo, en el lugar del accidente no se presentan advertencias de este fenómeno meteorológico ni otro tipo de señales de precaución o seguridad vial por parte de la autopista concesionaria Intervial Chile, empresa que tiene adjudicado el tramo Collipulli-Gorbea bajo el nombre de Ruta de la Araucanía”.
Tal fue la magnitud del accidente –asevera la querella– que el incendio que se produjo como consecuencia de éste, consumió el vehículo que conducía Christian Riveros y así también sus documentos, razón por la cual no pudo ser identificado en un primer momento. “Es por esto que el afectado fue trasladado por personal de emergencia en calidad de NN hasta el Hospital San José de Victoria, donde preliminarmente se dijo que permanecía con un 70% de su cuerpo afectado con quemaduras graves, esto tras una primera intervención quirúrgica”,
relata.
La familia se enteró del accidente por medio de las redes sociales y sin tener respuesta de Christian se preocuparon, tratando de dar con su paradero. A eso de las 15:00 horas, se les confirmó que el auto en el que se dirigía Christian se había visto involucrado en el accidente vehicular, por lo que se acercaron el centro médico local, siendo su padre, Miguel Soto Monsalve, quien
debió identificarlo.
Durante ese fin de semana, y luego de una intervención y varios exámenes, Cristian Riveros fue derivado el domingo 11 de octubre a un recinto hospitalario de Santiago, debiendo ser trasladado vía aérea hasta la Clínica Indisa, donde un médico especialista confirmó que el 90% de su cuerpo resultó afectado por las llamas, esto luego de una operación el día lunes 12 de octubre a las 08:00 horas.
Después de casi un año de la tragedia, Golpedigital.cl tuvo acceso a las primeras imágenes de Christian Riveros, luego de enfrentar decenas de operaciones con el equipo médico de la Clínica Indisa, donde desde un comienzo las probabilidades de sobrevivir a las lesiones que presentaba eran muy escasas o casi nulas.
Este padre de familia se logró levantar y poner de pie, dando una lección a cientos de personas que hoy luchan en los hospitales del país por salir adelante. Pero sabe que aún falta mucho por recorrer, que cada día que pasa es un espacio de tiempo ganado, es un regalo de Dios, un avance en esta batalla donde no hay espacios para dudas ni lágrimas.
LA RECUPERACIÓN
–¿Cómo avanza su recuperación?
–He estado bien gracias a Dios, recuperándome. Ha costado salir adelante, pero se ha podido lentamente.
–¿Cuántas intervenciones quirúrgicas ha tenido que superar?
–Un total de 50 operaciones. La parte más compleja es la recuperación porque es un proceso lento y en esto ha sido fundamental el apoyo de la familia. Sin ellos ya no estaría acá.
–¿Qué queda por recuperar?
–Tengo que operarme de la nariz que la tengo quebrada, también corregir una lesión en el dedo meñique de mi mano derecha. Esperamos que no haya más operaciones, pero nunca se sabe. Ahora estamos esperando que la piel se regenere lo máximo posible. Pero creo que voy a estar más de un año en Santiago solo en rehabilitación.
–¿Cómo está costeando las operaciones y el proceso de rehabilitación?
–Son varios factores, si bien el sistema GES cubre una parte, no lo cubre todo y la Clínica es cara. Tenemos que pagar un copago que son cuentas muy elevadas, estamos con mucha fe de que recibiremos los apoyos necesarios. Es difícil costear la permanencia de mi familia acá, pero su apoyo es fundamental para mi recuperación.
–¿Han recibido apoyo del Gobierno?
–En una oportunidad se generó una ayuda desde la Gobernación y en otra ocasión desde la Municipalidad de Victoria, pero hoy estamos requiriendo otro tipo de ayudas y apelamos al Gobierno, porque la verdad no podemos estar viviendo de la solidaridad de los vecinos, necesitamos ayudas más concretas de las autoridades.
–¿Qué le pediría al Gobierno?
–Que se ponga manito en el corazón y me ayude. Espero acceder a una pensión de gracia para poder detener un buen proceso de recuperación.
–¿Qué le pediría a la Justicia?
–Que se le dé más celeridad al procedimiento para que los responsables paguen por lo ocurrido.
–¿Cuál es el mensaje que le daría a la gente que está en una situación como
la suya?
–Que sigan luchando, que sean perseverantes. Y quiero agradecer a todas esas personas que me han ayudado de una u otra forma. Muchas gracias.
La familia de Christian ha lanzado una campaña para ir en su ayuda: