El verdadero “Día de la liberación”

0
115

Por Felipe Martínez Reyes, administrador público y psicoeducador. Ex consejero regional de La Araucanía.

Todo arancel es un impuesto con dos consecuencias inevitables: encarece la producción y dificulta el acceso a los bienes o productos que resultan afectados, porque éstos arrebatan recursos tanto del productor como del consumidor y se los da al gobierno.

A raíz del “Día de liberación” que proclamó el Presidente Donald Trump el 02 de abril, Chile tendrá que enfrentar un arancel del 10% si queremos vender nuestros bienes, productos, o servicios, en Estados Unidos. Esta medida afecta a los norteamericanos mismos que tendrán que comprar un poco más caro (inflación) el producto chileno -como vinos, uvas o salmones- así como, hace un poco más difícil la entrada de nuestros productos al mercado americano.

No se trata, por tanto, de una medida que produzca desarrollo económico, al contrario, produce ralentización de la economía. Pero la presente situación es un poco más compleja: nosotros tenemos un Tratado de Libre Comercio (TLC) vigente con Estados Unidos desde enero del 2004. Y en virtud de dicho acuerdo bilateral, Chile no establece aranceles a las importaciones norteamericanas, ni viceversa.

En consecuencia, hemos mantenido una relación fructífera que ha redundado en el beneficio mutuo por más de veinte años, basándose justamente en aranceles a $0. No hay razón para un cambio tan repentino en las reglas del juego, Chile no es China.

Por ello, el gobierno chileno debe arreglar la situación, Cancillería debe actuar con prontitud y diplomacia para volver al arancel $0 e impedir que nuestros productores se vean perjudicados.

Pero además de la razón económica o de utilidad, hay otro poderoso motivo para oponernos a aceptar este arancel, así como todo nuevo impuesto: el derecho de propiedad privada ¿Es que acaso nadie se sorprende que por la simple firma de un Mandatario mi negocio personal se vea perjudicado? ¿A nadie le sorprende que por la simple firma de un mandatario mi poder adquisitivo se vea mermado?

Le hemos otorgado demasiado poder al poder, sin justificación. Los gobiernos crecen y crecen, gastan como si no hubiera un mañana, nos endeudan y luego, nos pasan la cuenta, es inaceptable. Los gobiernos contribuyen muy poco al desarrollo económico de las personas, al contrario, lo estancan al producir inflación mediante impuestos o al ser incapaces de controlar al crimen, que vendría siendo otro impuesto también.

Por ello, aplaudo que, en Chile, la Oposición haya sabido unirse para rechazar la nueva reforma tributaria que pretendía el gobierno de Boric. Pero no es suficiente. Debemos bajar drásticamente los impuestos en Chile y aumentar la dificultad para futuras reformas tributarias a fin de devolver el poder económico a las personas y arrebatarlo cada vez más de las manos de los políticos. Sólo así los ciudadanos tendremos realmente, un “Día de liberación”.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí