Este jueves la Policía de Investigaciones, PDI, realizó el hallazgo de restos óseos en el sector rural de la comuna de Curacautín, las que podrían corresponder a personas desaparecidas en la zona, entre ellas, el joven universitario Gastón Ortega Chacón, quien está desaparecido desde el 24 de abril de presente año.
La policía indicó que el hallazgo se produjo en un área rural de la comuna señalada, específicamente en el sector aledaño a los ríos Dillo y Blanco, gracias a las tareas de búsqueda ejecutadas por personal de la Brigada de Homicidios de la PDI, en conjunto con el Grupo de Rescate Subacuático, Gersa, de la Cuarta Compañía de Bomberos de Temuco.
PADRE DE JOVEN
Gastón Ortega Candia, el padre del joven estudiante de 21 años de carrera de Veterinaria de la Universidad Santo Tomás, señaló que no saben si los restos corresponde a su hijo, y ahora como familia esperan los resultados del hallazgo de los análisis de un cráneo encontrado en noviembre en la misma zona.
“Ayer jueves se encontraron otros restos de osamentas cerca del lugar donde se produjo el hallazgo de un cráneo en noviembre, pero no sabemos si corresponde (…) Estos restos fueron enviados a Concepción para su análisis, pero ahora estamos a la espera de los resultados de los análisis del cráneo; nos tomaron pruebas de ADN con mi señora para ser cotejados y eso fue enviado el 06 de diciembre a Santiago ”, dijo.
Este padre manifestó que como familia se encuentran muy angustiados por la demora en la investigación. “Esto ha sido un calvario para toda la familia, no podemos estar tranquilos, estamos en una eterna espera, pedimos a la Médico Legal y a la Fiscalía un poco más de respeto por las fechas que se avecinan (…) Nos hemos tenido ningún llamado y menos del fiscal que supone que está a cargo de la investigación del caso de mi hijo, estamos como en el aire”, expresó.
CASO PAOLA ALVARADO
Señalar que los restos encontrados pertenecen a una persona, situación que será aclarada a través de los peritajes encargados por el Ministerio Público.
Recordar que las osamentas también podrían corresponder a Paola Alvaradon Cortez, la trabajadora sexual de 34 años quien fue asesinada en Curacautín en noviembre del 2018, y cuyo cuerpo jamás fue encontrado.
Por este crimen fue condenado por homicidio Edwin Aedo Soto, a una pena de 14 años de cárcel. En su confesión el hombre, de 33 años, señaló que arrojó los restos de la victima al río Dillo.
