El candidato a gobernador por La Araucanía, Eugenio Tuma Zedan, quien va a segunda vuelta al obtener sobre el 30% de las preferencias en las elecciones pasadas, explica a  Golpedigital.cl sus prioridades para la ciudadanía si es el vencedor el próximo 13 de junio.

En esta segunda vuelta de gobernadores, Tuma enfrenta a Luciano Rivas, ex presidente de la Multigremial, que agrupa a diversos gremios de la zona.

El ex senador por La Araucanía, vinculado por años al Partido Por la Democracia (PPD), asevera que esta última elección fue una derrota del “Piñerismo” y la derecha.  

Tuma dice en esta entrevista que el voto debe ser obligatorio y asume que fue un error establecer el sufragio voluntario.

-¿Se  marcará un antes y un después en el mapa político nacional tras estas elecciones?

-Bueno esperamos que sí, marcará un mapa político donde el gran  derrotado es el “Piñerismo” y la derecha. Aquí se va a construir una nueva relación política (…) y eso tiene que ver con las nuevas autoridades que se están eligiendo y con el proceso de descentralización para que las regiones tengan mayor fuerza para postular sus proyectos con prioridades a nivel nacional.

¿Cómo ve a estos nuevos conglomerados políticos, con temor, con esperanza, cuál es su visión?

-El nuevo cambio y dibujo político que hay lo hicieron los electores el día domingo, donde no favorecieron a los partido tradicionales, muchos independientes que manifestaban un descontento con el sistema fueron favorecidos. La lectura que hay que  hacer es lo que requiere el electorado o el ciudadano, qué es lo que dijo, que no estaba contento con la respuesta que le estaba dando el Estado a través de un Gobierno tradicional, pero eso tiene que ver en mi opinión con la estructura del aparato del Estado.  

-Tenemos un Estado “Portaliano” en que todo se decide en Santiago, el ejecutivo tiene muchísimo poder y la usa de manera desequilibrada en favor de la decisión del ejecutivo y con la nula participación de los ciudadanos. Creo que si alguna vez la política se reconcilia con la ciudadanía será cuando se atiendan sus demandas; es cierto, la gente está enojada con la política, hay actos de corrupción en casi todas las instituciones, pero eso no quiere decir que las entidades dejen de funcionar o que dejen de existir. 

-La única forma de reconciliarnos con la ciudadanía es haciendo lo que ellos esperan, soluciones, no quieren más explicaciones. Es acercar la decisión de la gente y acercarla a aquellos que tienen el poder a los territorios, la participación y la transparencia, y resolver temas tan sensibles como que tengan agua, internet, acceso a riego; acceso fácil y a corto plazo al sueño de la casa propia y la salud. Esos son los grandes temas que están presentes en el descontento de la ciudadanía, que tengan un sistema de seguridad social, más que una constitución obligatoria, por lo tanto, creo que la respuesta al resultado electoral no es solamente porque no están contentos con el sistema y el rechazo a los partidos políticos, la gente está rechazando un modelo de sociedad donde el Estado está lejos del ciudadano. 

-Usted tuvo un amplio respaldo en estas elecciones como candidato a gobernador, pero no alcanzó y va a segunda vuelta ¿Cómo mira este escenario? 

-Bueno el no alcanzar no significa una derrota, fue una gran victoria, obteniendo el 30% de la votación con ocho candidatos. Todos  consiguieron una votación piso y entre todos suman el 60%, por lo tanto, llegar al 40% era casi imposible. Entonces me siento muy contento del respaldo ciudadano, primero porque obtuve una amplia ventaja con el candidato que me seguía, más de 10 puntos. 

-Segundo, que a pesar de la tendencia nacional en que existía un rechazo a los políticos tradicionales y a quienes estuvimos vinculados a la política en los últimos 25 y 30 años ha sido de unánime rechazo. Fueron  derrotados todos los que representaban a esa política, pero hicieron una distinción con este candidato que no estuvo dentro de la masa de rechazo por haber sido político, por eso algo tiene Eugenio Tuma que no cosechó la derrota, sino que cosechó una gran victoria que a pesar de estar a contra corriente logró una primera mayoría, por eso hay que hacer esa lectura respecto a que la política es bien recibida cuando se responde a la expectativa de la gente, cuando se hace una buena representación de la ciudadanía, lo hice en materia legislativa y en materia territorial, no es malo 30%, no es casualidad. 

Tiene que ver con una identificación con los temas de los ciudadanos, con los temas de la región y con las capacidades de gestión para asumir el cargo más importante que ha tenido La Araucanía en materia de descentralización y de trasladar el poder que está concentrado en Santiago y que no lo usan en las regiones, es una lucha de la Novena Región contra el centralismo, por lo tanto, la opción o decisión que van a tomar el 13 de junio los ciudadanos, si seguimos con una administración “Piñerista” o cambiamos a una administración regionalista que permita fortalecer La Araucanía y darle cara a las prioridades como es el agua y la conectividad de caminos e internet, riego, oportunidades para el desarrollo del turismo, generar empleo y apoyar a la microempresa y emprendedores, y la protección del medio ambiente.

-Tenemos una zona riquísima en medio ambiente que se está deteriorando si no hacemos políticas públicas para su protección; esta región multicultural también tiene que tener esa identidad y poner en valor lo que significa la diversidad de la población que tenemos en La Araucanía, especialmente de los pueblos originarios, es decir, el pueblo Mapuche. 

¿Estas facultades que tiene el gobernador son suficientes para acercar el Estado y el Gobierno a la gente?     

-No, el gobernador tiene sólo el nombre de gobernador, pero no gobernará, no tiene a su cargo temas como seguridad, que es importante para la ciudadanía; las fuerzas de orden y seguridad no están a cargo del gobernador. Sin embargo, si tendrá opinión en La Araucanía con respecto a  estos temas, hoy las conversaciones que tiene el intendente con el Presidente de la República es hacia arriba, mañana con el respaldo ciudadano y electo gobernador con un respaldo de más de un 50% se podrá sentar con el Presidente y tener una conversación horizontal y no vertical, y por tanto, lo que se discutirá en la mesa del debate tiene que ver con los temas que pone La Araucanía y no necesariamente los temas que elige el Presidente, de tal menara que la relación de la región con el poder y con todos los poderes del Estado será diferente, no tendrá todas las facultades que quisiera el gobernador, pero sí podrá suplir esa falta de facultades con el respaldo ciudadano y le da vocería y capacidad para instalarse a conversar y corregir, y a que sean atendidas las demandas que de verdad tiene la región. 

-¿Por qué la gente debería creer que un ex senador que tiene tantos años en política podría generar un cambio en La Araucanía, si no lo hizo anteriormente?.  

-Primero no existía el cargo de gobernador. Segundo era parlamentario y las facultades eran bastantes limitadas, pero a pesar de aquello se reconocen mis tareas legislativas que son más de 20 leyes que llevan mi nombre. Si se preguntan cuántos parlamentarios llevan leyes que son de su iniciativa, son muy pocas leyes y muy pocos congresistas. Fui un parlamentario que permaneció siempre al lado de los territorios y de los ciudadanos. El éxito que tuve con los programas, por ejemplo, de electrificación rural donde había sólo 10% de cobertura y el resto estaba a oscuras en el mundo rural, son más de 200 mil personas que se  favorecieron con la capacidad de gestión que tuve como parlamentario, eso lo ha valorado la gente. 

En materia de vivienda hay muchas poblaciones que se han construido gracias a la iniciativa de mi tarea parlamentaria en el territorio; cuántas familias formaron comités en mi oficina para conseguir el sueño de la casa propia, porque orienté aquellas familias y comités como poder realizar ese sueño. Hay dos poblaciones en la región que llevan mi nombre sin haberlo pedido, fue un reconocimiento al trabajo permanente de un gran equipo en torno a los problemas de vivienda.  

-Están el tema campesino con el mejoramientos de caminos, conectividad y construcción de puentes; la capacidad de hacer un proyecto y poder influir en un gran programa de energía eléctrica, por qué no voy a poder hacer un gran programa de internet, si lo hice como parlamentario sin contar con las facultades, lo puedo hacer como gobernador con mayores atribuciones. Es competencia del gobierno regional invertir en infraestructura y eso tiene que ver con las prioridades de los ciudadanos.

Hoy podemos crecer en convenios y aumentar el presupuesto en esa materias, sólo el 10% del total de lo que se invierte en La Araucanía lo decide el Core y claro hay un 6% que se distribuye a las organizaciones sociales y estamos todo el años en eso, pero el 90% de la inversión regional lo decide Santiago, que saben ellos de las prioridades de la región (…) No se hacen inversiones en función de las prioridades regionales, por eso creo que con mi aporte y la experiencia que tengo, porque no vengo a aprender este cargo, es urgente trabajar ya no en los diagnósticos, porque los tenemos, es trabajar en soluciones. Sé dónde tocar la puerta, con quién tengo que conversar y cómo lograr que esta región se oriente hacia mayores oportunidades de desarrollo y mayores oportunidades en educación y en infraestructura. Este gobernador con esa votación será un gran articulador de acuerdos. 

-¿Se siente vinculado a la vieja escuela en la política o siente que a través de su experiencia puede aportar?

-Es esa política que era respetada y que se acerca a los ciudadanos, que se acerca a sus representados y creo que es eso lo que ha extrañado la ciudadanía. Y lo que rechaza es la nueva política en que los políticos no hacen lo que la ciudadanía espera, yo lo hice, es cierto que estaba en política, pero no me pongan en el mismo saco que a todos los políticos, porque existen políticos que hacen su pega y otro que no. Yo hice la pega.

¿Cómo estos grandes acuerdos pueden ayudar a la paz social de La Araucanía? ¿Usted conversará con todos los sectores, incluidos grupos radicales en la zona?

Voy a conversar con los que quieren la paz, con los que quieren a la región con justicia y los que quieren una región con una capacidad de escuchar a todos los sectores. Voy a proponer que participen todos los sectores en una gobernanza, que participe la academia, los universitarios, los jóvenes, señalar que existen unos 55 mil jóvenes en educación superior sólo en Temuco, hay que invitarlos a participar en el diseño de políticas públicas y en materia de conflicto indígena, ésta es una decisión política del Estado. Lo que recomendó el documento “Verdad histórica y nuevo trato”, y esa receta hay que seguirla, cuando un enfermo no mejora con los medicamentos que le están dando durante mucho tiempo, hay que cambiar la receta y el Estado tiene que cambiar la receta respecto del tratamiento que ha tenido con el conflicto político que ha tenido con el pueblo mapuche. El tema de la delincuencia y violencia es una tarea que vamos a exigirles a las policías que cumplan con su pega y sean eficientes a los tribunales y al Ministerio Público.      

Es un problema que las nuevas autoridades sean elegidas con tan pocos votos, ¿usted cree que el voto debería ser obligatorio?

Creo que sí, fue un error nuestro de liberar la decisión y entregarle a los ciudadanos, entendiendo que eso podría ser un derecho solamente, y es una obligación, por tanto, la mejor salida que esto va encontrar en la reforma constitucional, tiene que ser que el ciudadano sienta que es una obligación la participación ciudadana en materia colectiva.

-¿Cómo ve Eugenio Tuma esta Constituyente que se viene con una nueva Constitución y cómo se ancla ahí el papel del gobernador?   

-Bueno creo que el gobernador será clave en transmitir lo que quiere la región a los constituyentes, será clave en el modo de influir que se lleguen a acuerdos para resolver los problemas que tiene el país; será clave el nuevo dibujo del poder, las constituciones son eso, establecer el poder y establecer los equilibrios. Chile está muy desequilibrado, el diseño de las últimas constituciones que tenemos datan del siglo XIX básicamente, nunca ha existido una oportunidad que la población participe, ahora ha sido masiva la participación de personas que van a representarle, que van a escribir la Constitución, que la van a diseñar y lo que ocurrirá con los poderes del Estado para los siguientes 50 y 60 años, y lo que ocurrirá con los equilibrios.  

Hay una legislación constitucional muy desequilibrada, el Presidente tiene exceso de poder y Santiago y el poder central concentra un exceso de poder que es inaceptable. Las regiones tienen que dejar de ser tuteladas desde Santiago y darles la libertad para que puedan resolver los temas regionales, si la gente está enojada con la política es porque no resuelven sus problemas de manera más cercana a los territorios, qué sabe Santiago que ocurre en los sectores rurales, con las necesidades de conectividad, caminos y agua, nos saben de eso, hay que acercar las decisiones a la gente y a los territorios, es ese el rol de un verdadero gobernador, el  que va a detectar en cada territorio qué es lo que falta, vamos a mirar con lupa cuáles son los desequilibrios y sus prioridades, y cuáles son los instrumentos, y si no están los crearemos con el objeto que la ciudadanía sienta que están siendo atendidas sus necesidades y sus demandas.

¿Si usted es elegido gobernador cuál es la primera medida que adoptará?

La primera medida tiene que ver con la contingencia, tiene que ver con la salud, con las condiciones para trabajar, las condiciones para recibir ingresos, esa es la primera medida que debo tomar e influir en las políticas nacionales, las personas pueden estar en cuarentena, pero con recursos; la segunda tiene que ver cómo reactivamos, pero una vez pasada la pandemia de salud que está bajando gracias a las vacunas, pero para la reactivación económica no hay vacuna, lo que tiene que ver ahí es tener prioridad de atender las necesidades de quienes crean empleo que son las pymes, por lo tanto, hay una tarea indispensable que tiene que ver con la reactivación económica, ya que está todo en el suelo producto de las medidas de restricción en materia sanitaria. Este no es un periodo normal y hay que tomar decisiones extraordinarias y reorientar inversiones que están comprometidas a la creación de fuentes de empleo y generar puestos de trabajo. 

La coalición que usted representó durante tanto tiempo como miembro del PPD hoy no tiene un candidato fijo a la presidencia, ¿cómo ve ese panorama?

-Ninguna coalición tiene candidato fijo a la presidencia todavía, quizás el más fortalecido y más visible sea la derecha con Joaquín Lavín, pero nadie tiene fijo su candidato y esperamos que este proceso se lleve a un debate lo más amplio posible y no hacerse la idea que una coalición por sí misma va ofrecer al país un candidato que resolverá todas las demandas; la ciudadanía va a elegir y hay que hacer la lectura correcta de los que está queriendo la ciudadanía, ella quiere un programa que resuelva sus problemas y todavía no hemos hecho un programa que llegue al corazón de los ciudadanos con los candidatos para atender las demandas; lo importante no es el nombre, sino que va a hacer esa coalición para que pueda ofrecer una oportunidad de capitalización electoral y eso no se hace solo con un buen nombre, se hace con un buen programa y eso es algo clave en este momento. 

¿Daniel Jadue aparece con cifras bastante interesantes?   

Sí, Daniel figura con cifras bastante interesantes, pero la coalición no ha resuelto todavía con quién hará acuerdos y tampoco cuál será el programa y la metodología en una primaria convencional o primarias legales, se está agotando el plazo para inscribir a los candidatos, está muy abierto el tema. 

-¿Usted hace la lectura que el próximo periodo de presidencia puede ser de ultraizquierda?

No creo que la ciudadanía vaya a votar por extremos ni de derecha ni izquierda, lo más centrado y lo que quiere la ciudadanía con sensatez la mayoría con sentido común es un gobierno que venga a resolverles los problemas de la gente y del país, y no los temas de un partido.   

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